Crónica Sant Martí



 XII OPEN INTERNACIONAL DE SANT MARTÍ 

 

 

Un torneo con claroscuros a nivel deportivo y muchas cosas a
comentar a nivel ajedrecístico y organizativo.

 

Por un lado, récord de inscritos y, también,
la edición más fuerte que se ha disputado.


En el grupo A participaron 4 GM, 10 MI, 7 FM, 8 MC y 1 MN, además del resto de
jugadores con un ELO FIDE superior a 2000 hasta completar los 50 participantes.

 

En el grupo B, 93 participantes tomaron parte
en las 9 rondas de esta edición, configurando un fortísimo grupo,
desequilibrado por el sistema de admisión basado en el ELO FIDE. Esto,
condicionado o no por la normativa del Circuit Català, debiera ser corregido o
tenido en cuenta por la organización, pues jugadores con un ELO FIDE bajo o
inexistente por no jugar torneos que computan para tal, participaron con "ventaja"
con ELO catalán muy superior. Imagino que, como hacen en otros torneos, es más
"justo" que haya 3 grupos, o poner unos premios para jugadores con
ELO catalán entre 1700 y 1800, por ejemplo, y entre 1800 y 1900. Muchos
modestos jugadores con ELO catalán hasta 1850, han peleado por sacar 4 o 5
puntos que, con otro sistema de premios, les hubiera dado alguna alegria. 

 

 

En cuanto al torneo, hay un aspecto terrible
y que, a pesar de la buena voluntad del Club Escacs Sant Martí y las posibles
justificaciones, no tiene perdón. Por mucho que lo pasado, pasado esté, ha sido
un infierno. El propio Luis Rojas lo pasó mal en muchos momentos y, como el resto de los molletenses, levantándose a cada momento para beber algo, tomar el aire o acercarse al aire acondicionado portátil que era el único punto decente de la sala debido al (insoportable) calor en la sala de juego. Se ha
jugado muy a disgusto por el calor. El hecho de que el aire acondicionado no
estuviese listo para el torneo ha sido una lacra. No sabemos que dirá la
Federació Catalana d'Escacs, pero un Torneo Internacional, no puede ni debe
jugarse en esas condiciones. El año próximo prometen que habrá aire acondicionado. Menos mal. Más de
uno ya no jugará, por si acaso.

 

En lo deportivo, destacar el magnífico cuarto
puesto en el
(durísimo) grupo A del MI Luis Rojas. Sólo cedió ante los GM
González y Moskalenko, y finalizó cuarto por el desempate, por detrás del
tercer clasificado, el también GM Ayram Abreu. Luis ha sido el mejor
clasificado de los participantes que no era GM y con uno de ellos, por detrás,
el GM cubano Lelys Stanley Martinez que acabó octavo.

Lo digo yo porque Rojas es modesto y un poco
inconformista: actuación excelente de nuestro amigo, compañero y profesor.
Cierto que él hubiera querido quedar mejor, pero el resultado del torneo visto
lo visto, es buenísimo. Seguro que el título de GM que ronda a Luis llegará más
pronto que tarde.

 

En cuanto al grupo B, sensaciones agridulces
en un reñidísimo torneo donde se ha repartido mucha leña en todos los tableros
(en palabras de nuestro compañero Antonio López que ha sido el mejor de los 4
nuestros en este grupo).

Por un lado, Cristian Fernández que partía
como uno de los jugadores con mayor ELO catalán no ha realizado un buen torneo,
teniendo en cuenta su calidad y su nivel de juego real. La verdad es que más de
una y más de dos partidas, se le han escapado y le hubieran aupado mucho más
arriba, como merecía el segundo jugador con más ELO catalán del grupo. Finaliza
el 29, partiendo el 10 del ranking oficial del torneo.

Antonio López ha realizado un torneo
constante y mejorando progresivamente, perdiendo sólo dos partidas. El hecho de
hacer 4 tablas le ha perjudicado en la clasificación final que acaba con unos
magníficos 5 puntos que, a buen seguro, hubieran sido un par más de haber
forzado un poco más la máquina en alguna partida. Este torneo le reportará, por
fin, ELO FIDE a Antonio, que partía el 80 por no tenerlo, aún a pesar de ser el
24 del ranking por ELO catalán. Finaliza en el puesto 37. 

Y Ramón Caro, como de costumbre, una de cal y
otra de arena. En términos globales, 4,5 puntos de 9, habiendo conseguido 3 el
año anterior, puede considerarse un buen resultado, pero tras haber dejado
escapar 2 partidas (una, ya "mítica" entre los molletenses que jugaron el torneo,
con mate imparable perdido por precipitación), queda un sabor agridulce. En
positivo, resaltar que los puntos conseguidos han sido más difíciles que los 3
del año anterior.

 

Resaltar que, por ejemplo, el ganador del año pasado ha
quedado este año en el puesto 21. Los 3 angoleños "sin ELO" (uno de ellos ha hecho 8 1/2 de 9) , el jugador alemán Joerg
Riekenbrauk y otros jugadores que este año han aterrizado allí, lo han puesto
complicadísimo. Ramon finaliza 46 partiendo del puesto 55.

 

Y, por último, y no menos importante, la
participación de Marçal Abadía en el grupo B, consiguiendo 3 valiosos puntos en
su primer torneo internacional, con este fuerte nivel. Finaliza 83 partiendo del 92 del ranking, lo que no está mal.

 

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